- La detección temprana del daño del nervio óptico y como consecuencia el tratamiento precoz, disminuye muy eficazmente el riesgo de ceguera que existe en fases avanzadas de la enfermedad.
Madrid, 9 de marzo de 2017. Sólo en nuestro país más de 1 millón de personas padece glaucoma, un grupo de enfermedades neurodegenerativas que dañan el nervio óptico y cuyo principal factor de riesgo es la presión intraocular elevada. Con motivo del Día Mundial del Glaucoma, la institución médica madrileña referente en oftalmología Clínica Rementería, comparte los datos más significativos de esta patología que para el año 2020 podría afectar a más de 80 millones de personas en todo el mundo.
- Se trata de una enfermedad asintomática, por lo que el paciente no es consciente de su enfermedad hasta que el glaucoma está muy avanzado.
- La detección temprana del daño del nervio óptico y como consecuencia el tratamiento precoz, disminuye muy eficazmente el riesgo de ceguera que existe en fases avanzadas de la enfermedad.
- Sólo en algunos tipos, como el glaucoma de ángulo cerrado o el glaucoma pigmentario aparecen síntomas como la visión borrosa o el dolor.
- El riesgo de padecerlo aumenta a partir de los 40 años por lo que es necesaria una revisión anual de nuestra salud ocular que incluya una tonometría o la medición de la presión intraocular, y una revisión del fondo del ojo para inspeccionar el nervio óptico.
- El principal factor de riesgo para el desarrollo y progresión del glaucoma es la tensión ocular elevada.
- Otros factores de riesgo son los antecedentes familiares de glaucoma, la diabetes, padecer miopía.
- La ceguera debido al glaucoma es de 6 a 8 veces más frecuente en afroamericanos que en caucásicos.
- La falta de prevención y el avance de esta enfermedad, hace que sea una patología muy presente en la población española mayor de 70 años.
- Una alimentación sana y variada en vitaminas y la ingesta habitual de cítricos representan una fuerte antioxidante que puede ayudar a reducir el riesgo de glaucoma.
- Vegetales como acelga, las espinacas, los berros, el brócoli y los espárragos, gran cantidad de luteína y zeaxantina, componentes relacionados con la vitamina A, que protegen los tejidos del ojo del daño solar y reducen el riesgo de desarrollar glaucoma.
En la actualidad el glaucoma afecta a más de 1 millón de españoles y se calcula que para el año 2020 afecte a más de 80 millones de personas en todo el mundo.